Invictus fuera de casa… ¡4 meses!
Tal día como ayer, un 25 de noviembre de 2018, el Málaga perdía en Extremadura su último encuentro lejos de Martiricos. Desde entonces, 4 victorias (en Mallorca, Zaragoza, Majadahonda y Tarragona) y 4 empates (en Oviedo, Tenerife, Córdoba y Soria). El MCF es el tercer equipo con más puntos (24) del campeonato a domicilio, tras Granada (26) y Albacete (25).
Kieszek, sinónimo de victoria
El meta polaco ha sido titular en liga cuatro veces durante la presente campaña. Volvió al once en Tarragona y cuajó una sobria actuación dando seguridad a la defensa sin encajar gol. Con Kieszek bajo los palos, el Málaga ganó todos sus partidos (ante el Tenerife, Albacete y Nàstic en dos ocasiones) recibiendo un solo tanto… y de penalti. Mejor, casi imposible.
Pache, la sonrisa del goleador
Su diana, que firmaría el mismísimo exjugador internacional luso Deco, dio el triunfo al Málaga en el Nou Estadi y plasmó un sueño personal convertido en realidad. Dani Pacheco, que venía de una lesión y entró en el 54’ de juego por Ontiveros, marcó en el 72’ su primer tanto oficial con el primer equipo malaguista. Desde su paso por los alevines de ‘La Base’ no sabía lo que era marcar un gol con la elástica blanquiazul. ¡Te lo mereces!
Ocho cambios en la alineación
Las bajas por sanción, lesión o el llamado virus FIFA propiciaron un lavado de cara significativo en el once de Muñiz. Además, en todas las líneas y con cambio de sistema incluido respecto al anterior choque en Soria. A excepción de Luis Hernández, Ricca y Adrián, el resto de futbolistas (Kieszek, Cifuentes, Diego Glez., Erik Morán, Ontiveros, Iván Alejo, Harper y Blanco Leschuk) volvieron a la titularidad y respondieron a las expectativas de manera notable.
El 0-1 o el 1-0 como marca registrada
En el inicio de temporada, plagado de victorias ajustadas, hablábamos de ‘la belleza del 1-0’. Ciertamente, un resultado así incluye aspectos positivos tales como minimizar el potencial ofensivo del adversario o el aprovechamiento máximo de los recursos propios. Casi la mitad de las victorias ligueras del MCF este curso (7 de 15) tuvieron el sello de un marcador apretado, pero válido para lograr el objetivo ansiado en cada partido: los tres puntos en litigio.
