El césped de La Rosaleda se renueva en verano
Los campos de las instalaciones del Estadio La Rosaleda se preparan para la estación veraniega con la tradicional remodelación de césped al acabar la temporada de competición.
El verde del Anexo y del campo principal de Martiricos serán protagonistas las próximas semanas de cambios significativos para renovar sus prestaciones, con el objetivo de lucir en un estado óptimo de cara a la campaña 23/24.
Un año más, el campo anexo y el estadio blanquiazul han respondido de manera sobresaliente a la exigencia diaria de los entrenamientos del primer equipo, y a los 21 partidos celebrados en casa en el curso 22/23. La Rosaleda también lució impoluta en los compromisos del CD Rincón, en la Copa del Rey, y de la Selección Española el pasado mes de marzo ante Noruega.
En estos días ha comenzado la ‘muda de piel’ antes de la inminente llegada del verano a la capital. El cambio fundamental, la transición de la especie Lolium perenne (C3) a bermuda (C4) basado en la eliminación de lolium perenne, además de tareas de escarificado, aireado macizo, resiembra, aportación de enmiendas y un recebado con arena.
Se prevé un tiempo de unas ocho semanas, aproximadamente, para que se completen la totalidad de los trabajos. El objetivo primordial, que el césped de La Rosaleda esté preparado para afrontar con plenas garantías la próxima temporada.
