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Crónica

Un punto de fe (2-2)

El Málaga CF firmó tablas ante el CD Lugo en un encuentro que disputó más de 35’ con un efectivo menos. Los blanquiazules lograron igualar un 0-2 con un doblete de Juande (70’ y 88’).

La escuadra malaguista recibió a la lucense, en el Estadio La Rosaleda, en el partido correspondiente a la jornada 15 de la Liga SmartBank al que ambos equipos llegaban separados por un punto, 21 los blanquiazules por 20 de los ‘alvibermellos’.

Pellicer, que recuperó su ubicación en el banquillo tras dos partidos de sanción, introdujo cinco novedades respecto al equipo que venció en Montilivi. Juande y Lombán ocuparon el eje central, Ramón volvió a la sala de máquinas, mientras que Jairo y Caye formaron parte del tridente atacante.

En cuanto al verde, ambos conjuntos pugnaron por hacerse con el control del cuero que se fue decantando por el blanco y azul. Sin embargo, fue el cuadro lucense el que se adelantó en el electrónico primero. Hugo Rama sorprendió a los escasos presentes y muchos telespectadores con un potente y ajustado disparo desde la frontal ante el que poco pudo hacer Dani Barrio (0-1, 26’).

Pese al tanto, los locales trataron de llegar con peligro a la portería rival y frecuentaron las inmediaciones del área contraria, pero el CD Lugo multiplicó su ventaja en el minuto 40. Ferrao Venancio aprovechó un rechace para rematar a quemarropa a escasos centímetros de las mayas (0-2). Con este resultado se llegó al descanso.

Pellicer introdujo un doble cambio en la reanudación, ingresando en el terreno de juego Joaquín Muñoz y Pablo Chavarría con una clara intención de volcar al equipo al ataque. Sin embargo, el colegiado expulsó con cartulina roja directa al blanquiazul Caye Quintana dejando a los malaguistas con un efectivo menos en el 56’, con más de 35 minutos por delante.

Todo parecía ponerse en contra para los de casa, pero ni el marcador en adverso ni la desigualdad numérica amilanaron al MCF que no cejó en el empeño de buscar los tres palos alvibermellos. Tanto fue así, que Juande logró acortar distancias tras una impecable asistencia de Joaquín Muñoz. El central remató en el mismo corazón del área, con un golpeo raso, el servicio del extremo para firmar el 1-2, 70’.

El gol insufló de esperanza a los malaguistas que continuaron con sus incursiones en territorio lucense. Las ocasiones se sucedieron en cascada y el tramo final del encuentro se convirtió en un auténtico asedio. Tanta insistencia al final tuvo su premio. Juande, de nuevo, volvió a superar al cancerbero contrario con un oportuno testerazo que igualó la contienda. (2-2, 88’).

El equipo echó el resto en los últimos coletazos del encuentro, pero el marcador no se volvió a mover. Finalmente, reparto de puntos en un duelo en el que el Málaga tiró de coraje y corazón.

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