Un centenar de abonados malaguistas disfrutó ayer de ‘Un atardecer en La Rosaleda’, un pícnic blanquiazul en familia que hizo las delicias de los más ‘peques’ en el césped del estadio.
Domingo 1 de junio caluroso en el que la Familia Malaguista lo fue más que nunca en el verde del recinto de Martiricos, entre las 18:30 y las 21:30 horas, aproximadamente.
‘Un atardecer en La Rosaleda’ simbolizó a la perfección la sinergia entre el Club y, en este caso, cien abonados que pasaron en familia de manera exclusiva una jornada plagada de actividades ideada para los niños.
Miniporterías para meter goles, carreras de relevos, el popular ‘juego del pañuelo’, ‘pintacaras’ o dibujar coloreando el escudo del Málaga CF tuvo premio, en forma de bufanda malaguista para los que superaran con éxito las pruebas.
A la cita no faltó la mascota ‘Súper Boke’ y tampoco quisieron perderse el evento los futbolistas del primer equipo Alfonso Herrero y Nelson Monte, acompañados por sus respectivos familiares.
En el epílogo hubo un sorteo entre los presentes de una camiseta oficial blanquiazul de la temporada 24/25, otra conmemorativa de la ‘Doble D’ firmada por Dely Valdés y Darío Silva, unos guantes de portero y unas botas, con Alfonso y Nelson como particulares ‘manos inocentes’.
Colofón a la temporada 24/25 en La Rosaleda con una celebración del sentimiento malaguista en familia. Una jornada mágica y singular que refuerza los lazos entre el Club y su afición. Porque, juntos, somos invencibles.