En los primeros minutos se resolvió rápidamente la primera incógnita en La Rosaleda: el estado del terreno de juego. El césped lucía espléndido y hay que darle la enhorabuena a todos los operarios que en apenas cinco días han hecho posible este milagro.
La siguiente duda era cómo iba a salir el Málaga CF al campo, con la vuelta de Weligton y la incorporación de Juanpi como titular, y el equipo blanquiazul la disipó pronto. Los malaguistas saltaron al terreno con personalidad y en los primeros minutos tuvieron varios acercamientos y córners con los que pusieron cerco a la portería rival.
El gol seguía siendo la asignatura pendiente y a pesar de las buenas sensaciones el primer tanto de la temporada no llegaba. La tuvo Horta en el segundo palo, tras un buen centro de Duda, pero su lanzamiento salió mordido.
Por su parte, el Villarreal, replegado, esperaba su oportunidad a la contra y llegó en las botas de Baptistao que se encontró con un descomunal Kameni que rechazó el peligro.
La segunda parte empezó con el mismo guión y Javi Gracia echó más leña al ataque con la entrada de Duje Cop.
La suerte en este inicio de temporada no está del lado del Málaga CF y en el minuto 27 se demostró con una dudosa falta que el árbitro decretó en el lateral del área y el posterior centro que Tissone despejó hacia dentro de su propia portería.
Ante la adversidad el equipo se creció y fue a tumba abierta. Tighadouini, recién incorporado al campo, se sacó un buen disparo que el portero visitante despejó a córner. El gol estaba cerca y casi lo consigue Charles en un remate de cabeza.
Otro jornada más queda la sensación de que el Málga CF merece algo más pero tendrá que esperar para conseguir su primera victoria de la temporada.
