El Málaga CF y la AD Mérida se enfrentaron este domingo -5 de mayo, Día de la Madre- en el encuentro correspondiente a la jornada 35ª de la Primera Federación. El partido se disputó en el Estadio La Rosaleda ante 16209 espectadores.
Sergio Pellicer salió de la partida con A. Herrero; C. Puga, Nelson, Juande, Víctor; Genaro, Ramón, Ferreiro, Dani Lorenzo, Kevin y Dioni.
Los blanquiazules saltaron al verde con la firme intención de imponerse rápido, pero el encuentro se les puso muy pronto cuesta arriba; el jugador romano Busi aprovechó un contrataque para superar a Herrero en un mano a mano (0-1, 8’).
El tanto no amilanó a los locales que hilvanaron dos jugadas consecutivas de ataque, pero sin demasiado éxito. Cumplido el minuto 20, Ramón tuvo que ser sustituido por Larrubia por unas molestias en su cuádriceps derecho. El futbolista abandonó el terreno de juego por precaución a falta de pruebas médicas que determinen su estado.
Tras varias aproximaciones blanquiazules sin consecuencias, se llegó al descanso con el 0-1.
Tras la reanudación, Ferreiro estuvo muy cerca de firmar las tablas. El extremo remató de volea al primer palo, pero el guardameta rival logró detener el intento. Herrero, por su parte, logró escupir un nuevo mano a mano que se dio en el minuto 47 tras una rapidísima contra El cancerbero volvió a protagonizar una parada espectacular.
El Málaga CF intensificó sus acometidas en ataque y merodeó con mayor peligro el área contraria. Un activo Larrubia protagonizó dos disparos en el 48’ y en el 53’ (este último fue despejado con mucha dificultad por el portero contrario).
La insistencia blanquiazul al fin tuvo recompensa en el 58’. Una coral jugada en la que intervinieron Genaro, Nelson, Dani Lorenzo y Ferreiro culminó en un paso de la muerte del extremo a Dioni que remató a placer. Un gol que el equipo y la afición celebraron con una mezcla de alegría y rabia (1-1, 58’).
En los últimos compases, los locales se lanzaron descaradamente al ataque embotellando al rival en su área. Antoñito Cordero estuvo cerca de meter un libre directo desde la frontal y los blanquiazules encadenaron varios saques de esquinas consecutivos, pero la zaga romana no permitió que el marcador se moviera más. Con los tres silbidos del colegiado se decretó el reparto de puntos.