Pedro Contreras llegó ayer mismo a Trinidad y Tobago, ciudad de residencia del colegiado asistente, Michael Ragoonath, con el que pudo entrevistarse. Contreras, con Alfonso Manzaneque como compañero de aventura, ha recorrido las 3.300 millas naúticas a vela -6.000 kilómetros- que separan Benalmádena de Trinidad y Tobago para dialogar con el asistente del famoso partido que dejó a España fuera de las semifinales del Mundial 2002, Michael Ragoonath, que accedió a la entrevista de manera cordial.
En ella, Ragoonath puso de manifiesto su error, que le costó su ausencia en el Mundial de Alemania 2006, y deseó lo mejor a la actual selección española de cara al Mundial de Sudáfrica 2010. Un fallo garrafal al levantar el banderín e invalidar una acción de Joaquín que acabó en gol (mal anulado) de Morientes, ante la anfitriona Corea en plena recta final del choque de cuartos de final, hecho decisivo a la postre debido a la eliminación por penaltis del cuadro español frente al coreano de Guus Hiddink.
Reto conseguido para un aventurero como 'Koke', fan absoluto de la navegación marítima desde hace muchísimos años en una pasión compartida con el fútbol. Logro casi tan increíble como su presencia en la Copa del Mundo 2002, en Corea y del Sur, cuando acudió a la llamada de Camacho a última hora -por una lesión rocambolesca de Santi Cañizares- representando al MCF con España en la cita mundialista.
