De Málaga a Japón
La Fundación MCF hizo posible el encuentro entre la Escuela de Fútbol Suparcapacitad@s y la Escuela del Málaga CF en Osaka.
Que el malaguismo traspasa fronteras es algo que está fuera de toda duda. Para muestra, la Escuela del Málaga CF en Osaka, Japón, un grupo de jugadores de entre 8 y 18 años, que presumen de blanquiazul desde hace dos años en el país del sol naciente, bajo la coordinación de Satoshi Arashima.
Jugadores y jugadoras de la Escuela de Fútbol Supercapacitad@s y de la Escuela MCF en Osaka se conocieron vía telemática, con una diferencia horaria de ocho horas y con el deseo de poder conocerse en persona tras la gran experiencia vivida durante el encuentro.
Durante más de una hora, unos y otros intercambiaron preguntas y respuestas, hablaron de sus métodos de entrenamiento y estrecharon lazos. Uno de los jugadores de la escuela japonesa, Haruto Tanaka, de 18 años, tendrá la oportunidad de entrenar unos meses en equipos de La Academia MCF.
Ambas escuelas sintonizaron a las mil maravillas, hasta el punto que Carlos Fernández, el ‘Pichichi’ Genuine, prometió dedicarles los futuros goles a los jugadores de la Escuela del Málaga CF en Osaka, mientras que los japoneses estarían encantados de cruzar el globo para jugar un partido contra los Supercapacitad@s en La Rosaleda.
Un reto para la parte final de la quedada: elaborar platos típicos del país de sus nuevos amigos. De esta forma, los jóvenes japoneses harán tortillas de patatas y los jugadores del Genuine se atreverán a preparar sushi.
Por último, se despidió el encuentro al son de un Genuisalema que se bailó a 14.000 kilómetros de distancia.
